El hecho de que dispongamos nuevas tecnologías nos ofrece una serie de oportunidades laborales y personales interesantes. Entre ellas, encontramos el hecho de buscar trabajo, entretenernos o informarnos sobre cualquier noticia, puesto que en Internet encontramos todo. A pesar de la comodidad, existen ciertos riesgos a la hora de incluir datos en la red, puesto que muchos de ellos son sensibles.
Con ello, nos estamos refiriendo a los datos del banco, información personal o profesional que puede ser robada en la red. Para ello, encontramos el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), encargado de regular el tratamiento de la información personal en Europa.
El objetivo de la RGPD es la protección del derecho a las personas físicas a preservar sus datos personales
La RGPD establece cuáles son las pautas a seguir respecto al tratamiento de los datos personales de las personas físicas. Asimismo, otro de sus objetivos es establecer las normas respecto a la libre circulación de los datos. Sin duda, el fin más relevante es el de la protección del derecho de las personas físicas a preservar sus datos personales, asegurando el respeto a los derechos, así como a las libertades halladas en la Constitución Española.
La normativa fue efectiva en 2018 y en este momento, tanto empresas, como profesionales y entidades públicas que manejasen datos personales, tuvieron que obligarse a su cumplimiento, que sigue vigente hoy en día. En España, la adaptación se realizó mediante la LOPD y encontramos ciertas indicaciones para la adaptación de la RGPD.
En primer lugar, debemos destacar el consentimiento por parte de los clientes, así como la obligación de informar y designar un Delegado de Protección de Datos. Además, firmar un contrato con los encargados del tratamiento, establecer un contrato de confidencialidad con los trabajadores de la empresa, un registro relativo a las actividades de tratamiento, así como un análisis de los riesgos. Además, cabe remarcar que se deberán notificar los incidentes que se produzcan en seguridad y se realizará una evaluación del impacto.
Debido a que la Protección de Datos es un tema altamente sensible, es importante acudir a los expertos que cuenten con años de experiencia en la materia. Este hecho, permitirá obtener calidad en el servicio, así como sin asesoramiento ejemplar por parte de personal que conoce el tema. Deberá conocerse el reglamento, pero no solo ello, sino también los distintos niveles de sensibilidad que existan en la tipología de los datos.
En elemento en que busquemos una empresa que ofrezca estos servicios, deberemos fijarnos en ciertos aspectos muy importantes. Entre ellos, que lleven a cabo el proceso de adaptación de la RGPD para que se cumpla con la nueva normativa de datos de carácter personal, así como que se encarguen de que los documentos estén actualizados y que tanto la ayuda como el asesoramiento sean una garantía.
Por último, no debemos olvidar el papel crucial del Delegado de Protección de Datos como elemento esencial del RGPD para así tener la completa seguridad del cumplimiento de la normativa, así como la protección de datos en las organizaciones.